Así dijo SLAYER adiós en su último show en Europa.

SLAYER tocó su último concierto en Europa el pasado sábado, 3 de agosto en Hanns-Martin-Schleyer-Halle en Stuttgart, Alemania. Las bandas de apoyo para la noche serían ANTHRAX y ALIEN WEAPONRY.

Justo después del concierto, el baterista de ANTHRAX Charlie Benante publicó en Instagram fotos de Tom Araya y Kerry King de SLAYER despidiéndose de los fans desde el escenario, así como una foto entre bastidores de Benante, Araya y el guitarrista de ANTHRAX Scott Ian. Charlie escribió en un pie de foto: "Esta noche fue el último show oficial de @slayer en Europa... Este fue un momento muy emotivo y de alguna forma estoy feliz de haber estado aquí para ser parte de él #reigninblood #slayerfarewelltour2018 #sad @anthrax familia"

 SLAYER se embarcará en "The Final Campaign", la séptima y última etapa de su gira mundial de despedida en noviembre. Este último hurra comenzará en el ExploreAsheville Arena en Asheville, Carolina del Norte, y se podrá ver a la banda despedirse en el Foro de Los Ángeles el 30 de noviembre. Acompañando a SLAYER en este último paseo están PRIMUS, MINISTRY y PHILIP H. ANSELMO & THE ILLEGALS, quienes apoyarán todas las fechas.

La gira final mundial de SLAYER comenzó el 10 de mayo de 2018 con la intención de tocar en el mayor número de lugares posible, para facilitar a los fans ver por última vez un concierto de SLAYER y poder despedirse. Para cuando este periplo de 18 meses termine el 30 de noviembre, la banda habrá completado siete etapas de la gira, además de una serie de festivales de verano, con más de 140 presentaciones en 30 países y 40 estados de los Estados Unidos.

La última gira mundial de SLAYER ha sido un viaje salvaje. Tres conductores de autobús, cuatro de camión y un equipo de 32 personas han viajado por todo el mundo para preparar el escenario de esta despedida. En la mayoría de los espectáculos, el experto en pirotecnia de SLAYER puso en marcha 160 libras de propano y 10 litros de alcohol isopropílico al 99%, lo que hizo que el crítico del Phoenix New Times comentara sobre los "pirotécnicos quema cejas que se podían sentir hasta 10 filas detrás del foso". En Toronto, un fanático fue expulsado del concierto antes de que SLAYER subiera al escenario, así que saltó al lago Ontario (que rodea el Budweiser Arena) y nadó de vuelta al lugar. Jay Cridlin, del Tampa Bay Times, escribió: "Empezando con la estranguladora canción de apertura ’Repentless’, SLAYER navegó por su set como un barco en forma de cigarrillo encendido cruzando el río Estigia, carbonizando el mosh pit junto al escenario", y Gary Graff, de Detroit, señaló en su revista de prensa de Oakland a los "10.000 metaleros que se perdieron el final de ’Juego de Tronos’ para rendir homenaje al cuarteto pionero". "La pura fisicalidad de su show fue algo para contemplar y fue otro indicio de que mientras la banda puede verlo solo como la carrera de toda una vida, ellos están saliendo por lo alto, tocando en su mejor momento", escribió Andy Lindquist para el SF Sonic, y Guy D’Astolfo con el Youngtown Vindicator terminó su revisión con esto: "Después de la nota final, Tom Araya se quedó solo, escudriñando a la multitud... forjando una huella mental del momento. Después de un minuto o dos, se acercó al micrófono y dijo:’Los voy a extrañar’. Entonces salió y las luces se encendieron."